¿Quién no vio en la casa de un amigo, abuelo, tío, vecino, profesor de música, de inglés o bellas artes una colección interminable de muñequitas acomodadas de mayor a menor, con increíbles diseños y regordetas?.
Si alguna vez te pasó de encontrarte con "Juana y sus hermanas" en versión rusa estamos hablando de las Mamushkas. No te estoy hablando de los chocolates de Bariloche, sino de "muñequitas".
Se llaman matrioshkas o babushkas también y es un suvenir por excelencia si llegás a ir a Rusia. Parece algo trillado o superquemado porque están por todas partes y la gente se cansa de verlas, pero en una repisa con una botellita de Black Label al lado y una lata de galletas danesas, queda súper y le da a tu casa un estilo muy vintage.
Bueno, pero no hablaremos de decoración soviética, sino de lo que son estas gorditas apilables y guardables en su caja mayor: lo normal en una serie de Mamushkas es que sean impares, que no superen las 19 o 20, multicolores y brillosas, aunque su origen no está en la ex URSS sino en.. ¡Japón!.
Sí, los nipones tuvieron la genial idea de estas muñequitas, pero en la Perestroika, un artesano ruso, Serviev Posad, las pintó de varios colores y las sugirió para vender en la tienda de juguetes. Y por ese entonces el clima político estaba caliente y la Mamu pasó a ser un obtejo banderil y patriótica de los militares de la ex Unión Soviética.
Pasan los satanlinistas, los Gorbachevistas, los leninistas y quedan las Mamushkitas. Así de simple, hoy sobreviven al paso del tiempo, son furor y no son artículos de vieja, sino un suvenir top que representa la maternidad y la alegría.
Si alguna vez te pasó de encontrarte con "Juana y sus hermanas" en versión rusa estamos hablando de las Mamushkas. No te estoy hablando de los chocolates de Bariloche, sino de "muñequitas".
Se llaman matrioshkas o babushkas también y es un suvenir por excelencia si llegás a ir a Rusia. Parece algo trillado o superquemado porque están por todas partes y la gente se cansa de verlas, pero en una repisa con una botellita de Black Label al lado y una lata de galletas danesas, queda súper y le da a tu casa un estilo muy vintage.Bueno, pero no hablaremos de decoración soviética, sino de lo que son estas gorditas apilables y guardables en su caja mayor: lo normal en una serie de Mamushkas es que sean impares, que no superen las 19 o 20, multicolores y brillosas, aunque su origen no está en la ex URSS sino en.. ¡Japón!.
Sí, los nipones tuvieron la genial idea de estas muñequitas, pero en la Perestroika, un artesano ruso, Serviev Posad, las pintó de varios colores y las sugirió para vender en la tienda de juguetes. Y por ese entonces el clima político estaba caliente y la Mamu pasó a ser un obtejo banderil y patriótica de los militares de la ex Unión Soviética.
Pasan los satanlinistas, los Gorbachevistas, los leninistas y quedan las Mamushkitas. Así de simple, hoy sobreviven al paso del tiempo, son furor y no son artículos de vieja, sino un suvenir top que representa la maternidad y la alegría.
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